La serendipia de Voltaire en Micromegas
Serendipia es definida en el diccionario como un descubrimiento o un hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se está buscando otra cosa distinta. También puede referirse a la habilidad de un sujeto para reconocer que ha hecho un descubrimiento importante aunque no tenga relación con lo que busca. En términos más generales se puede denominar así también a la casualidad, coincidencia o accidente.
En su relato Micromegas se da una serendipia : Voltaire menciona en esta obra a las dos lunas de Marte llamadas Fobos y Deimos, estas no fueron descubiertas oficialmente hasta 1877 por el astrónomo Asaph Hall, quien pudo verlas desde el Observatorio Nava de los Estados Unidos. Debido a esta coincidencia, uno de los mayores cráteres en Deimos fue bautizado como “Voltaire”.
El autor de Micromegas es: Francois Marie Arouet (conocido como Voltaire) quien nació en Paris en 1694 y murió en el 1694. Fue escritor, historiador, filosofo y abogado. Representó a la Ilustración, un periodo de defensa a la razón humana, la ciencia y el respeto hacia la humanidad. Fue miembro de la Academia Francesa.
Voltaire con obras como Candido el optimista y micromegas se muestra como ferviente opositor de la iglesia católica, símbolo de la intolerancia y de la injusticia. Convirtiéndose en un modelo anticlerical.
Su relato Micromegas fue considerado uno de los primeros relatos de ciencia ficción. En el destaca la critica al ser humano, a sus guerras, a su soberbia y ridiculez y sobre todo a la religión. El ser humano se considera el centro de atención del universo, la especie superior. Con micromegas, Voltaire, hace relativos estos pensamientos del hombre, minimizándolos ante un Universo complejo y desconocido y comparándolo a un insectos u hormigas. Este relato cuenta con catorce paginas y siete capítulos que narran como un gigante de la estrella Siria es condenado al destierro durante ochocientos años. En compañía de un habitante del planeta Saturno (que es mas pequeño que él), deciden ir a recorrer los diferentes planetas. Ayudados por un cometa y durante una aurora boreal llegan a nuestro mundo donde creen que no existe vida por ser los humanos tan ínfimos en tamaño. Una vez que los descubren se desatan diálogos de filosofía en el que los dos seres cuestionan a los humanos que primero creían que eran insectos.
Capítulo 1.– Viaje de un habitante de la estrella Sirio al planeta Saturno
Se presenta a Micromegas y se le describe como un gigante de ocho leguas de alto, habitante de la estrella Sirio. Se dice además que su tiempo de vida es distinto del de los humanos. A los 350 años descubrió formulas matemáticas, a los cuatrocientos hizo un tratado sobre insectos que le valió el destierro de su estrella por el “muftí” (corte) durante ochocientos años. Se dedico que viajar de planeta en planeta, recorrió la vía láctea, hasta que llego a Saturno allí tuvo una conversación con el señor secretario.
Capítulo 2.– Conversación del habitante de Sirio con el de Saturno
El habitante de Saturno y Micromegas conversan sobre sus diferencias. El saturnino afirma tener setenta y dos sentidos quejándose de que son pocas y de que por eso su imaginación va mas allá de sus posibilidades. Micromegas le dice que ellos tienen cerca de mil sentidos y aun así les quedan deseos vagos e inquietudes de que hay seres mucho mas perfectos. (todo esto es critica al humano que se considera superior y solo tiene cinco sentidos).
Discuten acerca de la brevedad de la vida a pesar de sus largos periodos de existencia. El saturnino alega vivir unos quince mil años.. y dice que no se atreve a emprender ningún proyecto por miedo a ser sorprendido por la muerte. Micromegas afirma que ellos viven setecientas veces mas largo y aun así dice que cuando son sorprendidos.
Allí aparece la definición sobre la muerte que hace Micromegas que es mi favorita: “Cuando llega el momento de reintegrarse a la naturaleza, para reanimarla bajo distinta forma -que es a lo que llaman morir-, cuando llega ese instante de metamorfosis, lo mismo da haber vivido una eternidad o sólo un día”.
Se describe el sol como blancuzco o ceniciento al que dividiendo los rayos salen siete colores, mientras que el sol de los sirianos es encarnado.
Deciden entonces embarcarse en un viaje a través de los planetas.
Capítulo 3.– Viaje de los dos habitantes de Sirio y Saturno
Ya a punto de embarcar, la querida del saturnino viene a quejarse de que este la deje. Llama mi atención que esta se consuela rápidamente con un “petimetre” (figurín, Don Juan, soberbio)
Se subieron a un cometa y llegaron a los satélites de Júpiter donde permanecieron un ano y descubrieron algunos secretos muy curiosos. Aquí hay una critica a la religión pues dice que los secretos fueron vedados por los señores inquisidores que no permitieron que los llevaran a imprenta.
Al proseguir su viaje se consiguen con el planeta Marte y es allí donde hablan de las dos lunas que aun no han descubierto nuestros astrónomos.
Agarrados de un cometa y durante una aurora boreal llegan al planeta tierra. (un 5 de julio de 1737) Piensan que esta desabitado pues no imaginan el tamaño de los habitantes de la tierra.
Capítulo 4.– Lo que les sucedió en el globo terráqueo
Almorzaron dos montañas. (así era su tamaño) y dieron la vuelta al globo terráqueo a pie en 24 horas. Al mar mediterráneo lo describen como una balsa imperceptible y al gran océano como un pequeño estanque con el agua que le llegaba a las rodillas al menor de ellos y a los talones al siriano. Creyeron que la tierra estaba deshabitada.
Esta es una descripción que hacen de la tierra:
“-Lo único que hay es que este planeta está muy mal hecho -replicó el enano-; irregular y mal dispuesto, resulta no sólo ridículo, sino caótico. ¿No veis esos arroyuelos que ninguno corre derecho; esos estanques que no son redondos ni cuadrados, ni ovalados ni de forma geométrica alguna? Observad esos granos de arena (se refería a las montañas), que por cierto se me han metido en los pies… Ved el acatamiento de los polos de este globo que gira y gira alrededor del Sol y cuyo régimen climatológico es tan absurdo que las zonas de ambos polos son yertas y estériles. Lo que más me hace creer que no hay habitantes, es considerar que nadie con un poco de sentido común querría vivir en él”.
Micromegas rompe entonces su collar de diamantes y cuando los recoge los usa como lupas y es así como descubre una ballena. Pensaron que este mundo estaba habitado solo por ballenas, comentan que no cabria un alma en un cuerpo tan chico. Con ayuda de los diamantes descubren un bulto flotando en el mar báltico que resulta ser un barco cargado de filósofos que regresaban de unos estudios en el circulo polar.
Capítulo 5.– Experiencias y reflexiones. Capítulo 6.– Lo que les sucedió con los hombres. Capítulo 7.— La conversación que tuvieron
Descubren a los seres humanos muy sorprendidos de que pueda haber seres tan diminutos y que ellos tengan vocabulario y razonen. Con una uña improvisan un amplificador de sonido y así pueden comunicarse y se hacen preguntas mutuas para conocerse. Se maravillan de que halla matemáticos entre ellos y puedan sacar cálculos. Micromegas no puede creer que el hombre sea tan soberbio. Les hablan de las guerras y no pueden comprender como pueden autodestruirse. También hay un critica a los gobernantes que “en la tranquilidad de su gabinete mientras hacen una digestión opípara ordenan el degüello de un millón de hombres y luego y dan luego gracias a Dios en solemnes funciones religiosas.
Las siguiente discusiones son acerca de la existencia del alma, el espíritu y la materia y de cómo se forman las ideas. (se nombran a los filósofos Aristóteles, Descartes, Malebranche, Leibnitz y Locke) Vale destacar algunas ideas sobre como definir el alma que se cruzan:
-El alma es una entelequia, una razón en virtud de la cual tiene el poder de ser lo que es; así lo dice expresamente Aristóteles, página 633 de la edición del Louvre.
-El alma es un espíritu puro, que en el vientre de la madre recibe todas las ideas metafísicas y que, en cuanto sale de él, tiene que ir a la escuela para aprender de nuevo lo que tan bien sabía y que nunca volverá a saber.
-Una aguja de reloj -dijo el leibnitziano- que señala las horas mientras suenan musicalmente en mi cuerpo, o bien, si os parece mejor, el alma las suena mientras el cuerpo las señala; o bien, mi alma es el espejo del universo y mi cuerpo el marco del espejo. La cosa no puede ser más clara.
El cuento termina con una critica a la religión cuando uno de ellos exponiendo a Santo Tomas dirigiéndose a los gigantes les dice que sus personas, sus mundos, sus soles y sus estrellas han sido creadas para el hombre. Esto hace reír a los gigantes y dejan caer a los humanos de sus manos. Casi sin creer que puedan ser tan infinitamente pequeños y con una vanidad tan infinitamente grande. Les ofrecen un libro de filosofía escrito en letra muy menuda para que puedan leerlo, pero cuando lo abren esta vacio.