María Bird Picó presenta su opera prima: “Tras esas gafas de sol”. El libro comienza su original recorrido con inusual dedicatoria, donde, sin olvidar a sus hijos se dedica el libro a si misma, planteándose un originalísimo caso de álter ego donde hace juego con sus dos nombres: Cito: “A Tere, quien yace bajo los complejos estratos existenciales de la María”. Su obra de la misma manera juega con la dualidad de la autora y estas otras catorce protagonistas. Mujeres todas, que dependiendo del punto de vista desde que son reconocidas son muy cuerdas y se enajenan para mostrarnos el lado absurdo de situaciones rutinarias, o están enajenadas para de repente ganar cordura. El libro de María y Tere presenta una propuesta refrescante y diferente en la literatura. Con un enfoque magnífico hacia las situaciones que enfrentan estos personajes, descubrimos la ironía y el humor negro entreverados para desembocar en conflictos existenciales que son librados con éxito por estas féminas. Estas, sin que nos demos cuenta, nos encauzan hacia una inapelable crítica social. Usando el teatro de lo absurdo, las situaciones inesperadas, y la irreverencia. La autora nos lleva sonreídos a desordenar esquemas grabados, a replantear supersticiones y a reevaluar conceptos.
La sabrosa apertura del libro con el atinado y amistoso prólogo a cargo de Sofía Irene Cardona nos prepara para lo que viene, al afirmar que como una de sus protagonistas, María se comió la morcilla. El final del libro no es menos placentero, cuando a través de los agradecimientos atisbamos a la autora, quien nos deja penetrar por breve espacio en su vida personal y literaria que por supuesto son inseparables.
Los catorce personajes están llenos de sorpresas. El encuentro de Carolina con el ídolo musical de su madre en el cuento “El deber”, hace a su protagonista reaccionar, volver a sus raíces, enfrentarse con su pasado y pasar de ser la camuflajeada Carol Douglas a la original y verdadera Carolina Pérez.
Cuentos como “La fama “, donde una madre compite con su bebe recién nacido por popularidad y la última historia del libro, “El secreto” donde La Guima, irreverente, llega a la fama deseada, ignorando los consejos del jefe de la disquera internacional y sin bajar de peso, con su sonrisa torcida, con su vestuario lánguido y su cara ajada por los años consigue el éxito enmascarada tras unos simples lentes de sol.
Al terminar de leer cada una de las historias me decía a mi misma que esa era mi favorita, pero mi opinión se desestimaba al leer la siguiente pues ganaba el mismo reconocimiento y así termine el libro con catorce historias favoritas.
Me complació en la presentación del libro a la que tuve el placer de participar ver que los encargados de hablar del libro de María Tere, lo hicieran todos con una sonrisa. Ninguno llevaba la cara de grave parsimonia de las presentaciones largas y polvosas de sonados autores. Había un aire de fiesta, de fresca camarería y entendimiento, resultado seguro de la huella que deja el tipo de literatura que presenta la autora: anécdotas liberadoras, insólitas y hasta graciosas. Una madre que frenéticamente no deja bostezar a su hijo porque leyó un estudio que esto lo hará más inteligente. El absurdo del tema nos hace recordar a esta sociedad de competencia donde desde el nacimiento los niños son víctimas de situaciones poco normales en supuestas búsquedas de oportunidades.
Marío Vargas Llosa en su libro Cartas a un joven novelista, compara la tarea del escritor con un strip tease en inversa. Recuerdo que explica la desnudez del escritor en el fondo de su obra, donde se encuentran sus vivencias y sus opiniones a las cuales va vistiendo poco a poco con situaciones, caracteres de personajes y otras ambages de la vida. El escritor queda disfrazado dentro de la obra y no lo descubres sino lo conoces bien. María Tere(o Tere María para que no se moleste ninguna con el orden de prioridad), está en sus personajes. Apostaría que es a ella a quien en el cuento “la libertad” que protagoniza la escritora Carmen Luisa a quien va dirigido el mensaje: “Traidora, no reniegues de tu verdadera vocación”. Porque no hay que dudar que María Y Tere o María Tere nació con esa chispa de escritora de la que hoy hace fuego con este libro que quema.
No podía faltar el toque erótico, en “El reto”, Renata de la Matta Ortiz, la mujer a la que le tomo dos divorcios llegar a su verdadera vocación, no busca celebrar su máxima creación (un motor que funcione con Etanol), con su hija o con su hombre sino con ella misma.
¿Qué pasa por la mente de la policía engafada que enfrenta la multitud enardecida ante una protesta? Pues nada menos que el último capitulo de una telenovela Mexicana. Así de inesperadas, de sorprendentes son todas las respuestas de este libro. ¿Quién se comió el último pedazo de morcilla del plato?, ¿Se reencuentra la escritora famosa con su amor de juventud en la Plaza de Mayo? ¿Qué hará la mochilera al sentir que el desconocido pasajero mete su mano bajo su manta azul celeste produciéndole más que desconcierto un agradable cosquilleo? Estas y muchas otras interrogantes aguardan a sus futuros lectores dentro de estas maravillosas historias engafadas.
2 Comentarios
edwincolonpagan · 14 mayo, 2014 en 6:21 am
Excelente entrada amiga. Nery, por fin estoy volviendo poco a poco a entrar en los blogs, estoy exhausto de la Universidad, ya que tenía tres cursos y simultáneamente tomando un curso para certificarme para ofrecer cursos en línea. Pero esta semana termino. Aunque no he comentado tus entradas, las he logrado leer, a destiempo, pero vale, por lo menos las disfruto tarde pero seguro. Me fascinas como escribes y tu labor de difundir y colaborar con los escritores es divino. Cuídate, mucho cariño. Un fuerte abrazo, Edwin
nerysantosgomez · 19 mayo, 2014 en 8:30 pm
Gracias Edwin!!